Los sospechosos de siempre
Tras numerosas indagaciones, se descubrieron los autores del robo en la Casa Central del Banco Nación. Luego de haberse visto implicados en un comprometido caso de tráfico de estupefacientes en la frontera con Bolivia, han vuelto a rodar por las calles porteñas cometiendo delitos, conllevando una amenaza para la sociedad.
Al parecer estos individuos disfrutan de los disfraces exóticos; ya en Jujuy habían ingresado al país con un artilugio muy troyano, escondidos dentro de un cactus gigante que se desplazaba sobrecargado de droga. Esta vez se volcaron al excentricismo de la mano de los Village People y fue así como violaron las cajas de seguridad del Banco Nación, sito en Bartolomé Mitre 326.
Según fuentes judiciales, habrían sido extraídos de los cofres 250 mil dólares, 30 mil euros, la discografía completa de Cher y un exclusivo diseño de un admirador de Versace, un cinturón rosa con strass.
"¿Drogas para qué?", interroga el obrero al tiempo que eleva su palita
Los principales sospechosos del golpe son los bandidos integrantes de un grupo que optó por denominarse "Macho Man” y disfruta viendo videos donde 6 individuos disfrazados bailan coreografías con un dejo homosexual en la cubierta de un navío, al grito de "They want you, they want you as a new recruit" (Ellos te quieren, ellos te quieren como un nuevo recluta).
Al parecer el grupo estaría liderado por un indio Cherokee, quien, en el último robo se encargó de las tareas distractoras. Entró dando un lamentable espectáculo montando un ridículo palo con la cabeza de Ico, el caballito valiente, en uno de sus extremos mientras lo perseguía un cowboy oriundo de Merlo (el Lejano Oeste, guarda el chiste!). Junto a estos malandrines se sumaron un obrero boquetero quien dedicó extensas noches al perfeccionamiento de túneles creados para ingresar al lugar del hecho, un agente de la Policía Federal encubierto (se sospecha que se trataría de un ex empleado del banco quien colaboró con la banda y termino volcándose a la delincuencia) y un motoquero, amante del cuero, las tachas y las canciones de Pappo, quien aguardaba la salida de sus compañeros en un camión Scania preparado para emprender la fuga. Por último, el sexto miembro del grupo, quien alternaba sus disfraces de marinero y militar, declaró su culpabilidad luego de haber sido sometido a la tortura de escuchar a Ricardo Montaner cantando a su oído durante 7 horas ininterrumpidas (Cachita!).
Proximamente se publicará un identikit de cada miembro de la banda...
Proximamente se publicará un identikit de cada miembro de la banda...
...Continuará
publicadas por nAn!Ska @ 10:08 p. m.
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