Cómo perder la paciencia en 40 minutos?
Hace poco tuve la desgracia de tener que aguantar a un personaje del escenario urbano que todos conocemos, una especie que lamentablemente está lejos de estar en extinción, el famoso remisero que se las sabe todas (y quiere demostrarlo en el tiempo que dure el viaje)!! Para intentar resumir 40 minutos de martirio, digamos que, entre otras cosas, tuve que soportar lo siguiente:
Empezó por comentar cómo preparaba empanadas armenias para luego seguir con un simposio del relleno al pollo donde explicaba la manera de cocinarlo mitad salado, mitad agridulce y no morir en el intento (creo que hasta especificó la cantidad de panceta que le ponía!!). Todo este conocimiento lo había adquirido del dueño de una carnicería de Valentín Alsina donde se había criado, dato que no tardó en dar a conocer (un tipo de barrio como verán).
A continuación comentó las aventuras de su amiga titiritera, Mónica! Además de enterarme de que nuestra amiga Moni trataba con chicos esquizofrénicos, también supe de una terapia que la misma aplicaba a un niño con Síndrome de Down que lo único que quería era meter su dedo en un agujero (sic).
Eso no es todo. Después de haber recomendado visitar a Dolina en el Bauen (creo que fue lo único rescatable dentro de su monólogo), como broche de oro, terminó el viaje relatando sus experiencias vividas en San Martín de los Andes, defenestrando a los mapuches a quienes tildó de ebrios, vagos y chúcaros. Con total entusiasmo comentó cómo uno de ellos pasó 20 días sin siquiera decirle hola hasta que un día, como por arte de magia, el tipo le empezó a hablar como si nada. Ahora, mi pregunta es la siguiente, si los veía tan vagos y ebrios, para qué se moría de ganas de entablar conversación con ellos no?
Con esto queda nuevamente confirmado que soy una persona sensible a ciertas situaciones que me hacen perder la calma (histérica si lo prefieren en una sola palabra) pero no creo ser la única persona que odia que le hablen y le saquen temas de conversación inconexos cuando es más ameno mirar por la ventanilla y babear hasta que nuestro cerebro se desconecte del mundo. Oportunidades de bajar? Sí, seguro que las tuve pero no sé si alguna vez comente que me caracterizo por tener impulsos masoquistas…

3 Comentarios:
A la/s 8:36 p. m.,
Anónimo dijo...
Ay voy a extrañar padecerte este cuatrimestre todos los miercoles y viernes
loco que onda hay remiseros copados me faltan las caritas del msn para expresar ironia
igual yo siempre me cuelgo hablando con ellos y me divierte pero yo hablo de futbol jejej
bueno loca (en todos los sentidos posibles que le encuentres a la palabra) te dejo besos
A la/s 9:26 p. m.,
lucy diamond dijo...
maminaa... te recomiendo q la proxima vez, en unacto masoquista (pero mucho menor q este) salgas disparada del vehiculo, porq rodar por el pavimento seguro q trae menos sufrimiento q eso. Todavia me acuerdo del remisero ese q a veces nos traia de vuelta q era un viejo q no tenia idea de las calles... creo q llegabamos de casualidad...
besotee
A la/s 9:57 p. m.,
Anónimo dijo...
bueno ante todo sinceridad loco, no lei lo que decia lo que escribiste pero me pediste que ponga algo copado, lastima que no puedo cumplir con tu pedido pero por lo menos firme che y por ahi tambien lo leo en un rato...bueno me voy despiediendo, un beso nani, te quiero un monton
El Guacho
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